
Contents
Se acerca el veranito, acechan los primeros calores y esto es una señal inequívoca de que… ¡empieza la temporada del gazpacho! Se acabaron los estofados, los cocidos y las sopas calentitas para dar paso a sopitas fresquitas y ligeras. Y de entre todas ellas (al menos aquí en España), la reina es el gazpacho. Ya sé que esto suena un poco a anuncio de pastas Gallo (“este año se llevan los lazos, los tulipanes…”), pero nada más lejos de la realidad.
Para aquellos que todavía no han probado el gazpacho, ahí va una breve descripción de uno de los platos estrella de cualquier verano español: una sopa fría de tomate, pimiento, pepino y ajo aderezada con aceite, vinagre y sal. Un plato sano, sabroso y rico, rico. Como pasa con la tortilla de patatas, cada maestrillo tiene su librillo y en cada casa hay pequeñas variaciones que hacen que el gazpacho de mamá sea el mejor del mundo mundial. Hay quien le añade miga de pan, quien acompaña el gazpacho con tropezones de verduritas cortadas a daditos y tostoncitos de pan… Las variaciones son múltiples, pero la base es siempre la misma.
Un plato que, como pasa con muchos de los platos estrella de la gastronomía española, tiene un origen muy humilde. Y es que el gazpacho nació de la necesidad de campesinos y jornaleros de llevarse una comida rica en nutrientes, y que a la vez fuera fresquita para mitigar las altas temperaturas que se pueden alcanzar en Andalucía en pleno verano. Y así hasta nuestros días. El gazpacho se ha popularizado y no entiende de clases sociales. Cuando llega el verano no hay quien se pueda resistir a un buen vaso de gazpacho.
Ya sabemos que ningún gazpacho puede superar el que nos preparan con tanto mimo nuestras mamás o abuelitas, pero aprovechando el origen 100% andaluz de esta refrescante sopita, y dado que en las fechas que corren apetece más tomarse un gazpacho que un plato de lentejas, te propongo los mejores bares y restaurantes de Sevilla en los que podrás probar un auténtico gazpacho andaluz. Hay quien se atreve a decir que fue precisamente en Sevilla donde se inventó el gazpacho, aunque yo no lo aseguraría con tanta vehemencia (no se me vaya a enfadar nadie).
1. El Eslava
En el tradicional barrio de San Lorenzo encontrarás este restaurante y bar de tapas típicamente sevillano que elabora los platos más clásicos de la gastronomía andaluza con esmero y con los mejores productos. Su gazpacho, por ejemplo, está elaborado con hortalizas de su propio huerto ecológico. Y no solo su gazpacho goza de gran popularidad entre los sevillanos, sino también su salmorejo, las croquetas caseras o las navajas a la plancha. Platos clásicos con un toque de modernidad han hecho que el restaurante aparezca en la prestigiosa Guía Michelin desde hace más de 10 años.
2. Bodeguita Casablanca
Un bar de tapas concurrido por locales y algún que otro turista que se desvía aposta con las recomendaciones que algún amigo le ha dejado anotadas en un papel (ya amarillento). Camareros que te cantan los platos del día, como se solía hacer antaño. Un personal agradable y dicharachero que atiende al comensal con simpatía. Y unos platos para chuparse los dedos. Su pescadito frito es ya todo un clásico. Y su salmorejo, y sus arroces, y…. por supuesto, su gazpacho. Y unos precios más que razonables. Y si no te lo crees, curiosea su web y échale un vistazo a la carta. ¿Cómo podía faltar la Bodeguita Casablanca en nuestra list? Buenísimo, con ese aire típicamente andaluz y barato.
3. El rinconcillo
El Rinconcillo no solo es famoso por tener uno de los mejores gazpachos de Sevilla, sino que además es toda una institución en el mundo de la restauración. Esta casa de comidas se fundó en el año 1670 y presume de ser el restaurante más antiguo de España.
Esta taberna-restaurante se encuentra en pleno corazón de Sevilla y su solera y buen hacer lo han convertido en un lugar de peregrinaje obligado del tapeo sevillano. Entre los platos y guisos caseros que ofrecen en su carta, nunca faltará un buen gazpacho andaluz preparado de la forma más tradicional.
4. El Giraldillo
En una de las plazas más hermosas de Sevilla, en el número 2 de la Plaza Virgen de los Reyes, y en un enclave privilegiado frente a la Giralda, se encuentra este restaurante que hará las delicias de sus comensales con platos típicos de la gastronomía andaluza. Y entre ellos no podía faltar, por supuesto, el gazpacho. Acomódate en su terraza, rodeada de naranjos, y admira las fantásticas vistas de la Catedral, a la par que degustas los platos más emblemáticos de la cocina andaluza.
5. Mesón Puerta de Jerez
En el centro de Sevilla (entre la Catedral y la Maestranza) se encuentra un clásico de todos los tiempos. Su salmorejo, su gazpacho, y sus mariscos le han dado la popularidad de la que goza actualmente. ¿Y quién es el responsable de tanto éxito? Don Enrique Pazos, quien regenta este mesón desde hace ya 25 años. Ya te advierto que no son pocos los que quedan enamorados de sus salones a la antigua usanza, donde podrás descansar y renovar tus fuerzas para seguir con el maratón cultural del centro sevillano.
Yo no sé tú, pero me ha entrado una sed… Así que a falta de poderme teletransportar a Sevilla y tomarme un gazpacho bien fresquito en alguno de los restaurantes de nuestra lista, voy a abrir la nevera y a servirme un gazpacho bien fresquito… esta vez de mi madre, que no está nada mal tampoco. 🙂
Por cierto, si quieres conocer Sevilla a fondo, recuerda que puedes descargarte nuestra guía de Sevilla totalmente GRATIS.