
Justo en la entrada del Templo de Zeus Olímpico, se alza el Arco de Adriano o Puerta de Adriano, como es también conocido. Estos dos monumentos de la época romana son de los primeros que todo turista ve cuando llega a Atenas, debido a su situación tan céntrica, de camino a la plaza Syntagma. Esta presentación es solo un anuncio de que te encuentras en una ciudad con una historia que se remonta muchos siglos atrás. Muchos, muchos.

El emperador romano Adriano, quien mandó edificarlo en el año 131 de nuestra era, pasó a la historia por su reinado de paz. En el mismo, llevó a cabo una gran empresa de edificación de construcciones públicas, entre las que se encontraba este arco, pero también el Olimpeion o el refuerzo de la muralla alrededor de la ciudad.
El emperador Adriano se convirtió, en el siglo II, en un enamorado de la cultura y la vida en Grecia, y durante su dominio, Atenas era vista casi como una segunda capital del Imperio Romano.
El arco de Adriano se construyó en mármol pentélico en el lugar donde, en el siglo VI a.J.C. se encontraba una de las puertas de entrada a la ciudad. Su intención era diferenciar la ciudad antigua, que se recogía en dirección a la Acrópolis, de la ciudad moderna romana, que se desplegaba hacia el exterior. Por este motivo, son bien curiosas las inscripciones que hay a ambos lados de la puerta. Por la parte de la ciudad griega antigua, se puede leer “Ésta es la vieja ciudad de Teseo” y, sin embargo, por la parte de la ciudad romana, el emperador mandó la siguiente inscripción: “Ésta es la ciudad de Adriano, y no la de Teseo”.
El Arco de Adriano lo puedes ver bien e incluso fotografiar desde fuera del recinto, pero la verdad es que bien vale la pena entrar a conocer todo el conjunto del Templo de Zeus Olímpico. Aquí, algunos datos prácticos:
- Entrada: 4 €
- Horario de verano (abril a octubre): de 8h a 19:30h (excepto lunes, que abren a las 11h)
- Horario de invierno (noviembre a marzo): de 8:30h a 15h
Aquí te dejamos un mapa para que veas todo lo que te encontrarás allí:
Evidentmente, pronto publicaremos otro post sobre el templo principal. Aunque queda poco en pie, es alucinante.